La fecha límite es mi arma mortal, no soy la persona más moderada o paciente. ¡Qué sorpresa!
Le pido al Padre su salvación y solo me presenta pruebas; francamente, su guerrero está agotado, Señor.
Me presentas oportunidades hermosas en mi tierra natal y mi sueño es vivir en el campo francés. Tengo la mente completamente dividida entre mi realidad y mi fantasía.
No sé qué quiero hacer con mi vida a largo-plazo, lo que sí sé es que un momento oscuro de mi vida la obra del señor Aznavour y la película "Medianoche en París" me ilustraron, más me convencieron de que todas las calles llevan a París.
La cruda verdad del asunto: quiero replicar las estrategias artísticas de los grandes próceres del siglo XIX. Quiero completamente absolver el espíritu republicano francés para volver y expresar a través del arte una revolución cultural.
Hace meses apliqué en algunas residencias artísticas, buscando en mi inocencia juvenil como profesionalizar mi arte.
Se me olvido por completo la gestión. Meses después, mi salud mental no concordo con mi Bon Vivant, pero el día que salgo de mi rehabilitación psiquiátrica. Reviso mi e-mail buscando alguna bobería.
Mi alma (y mi bolsillo) no está preparado para la carta que estoy leyendo.
"Has sido aceptado en el Chateau d'Orquevaux, la residencia de artistas más prestigiosa del mundo, ambas becas disponibles le aplican"
Excentricismo se queda corto, mezclado con un renovado sentido de responsabilidad social. Estoy en las nubes. Preparo mis finanzas para hacer el pago a tiempo.
Ahora estoy a dos días de realizar mi "depósito" y me quedo corto para cubrir los impuestos.
Solo quiero llegar a esa estación y siento que el tren se me hace tarde.
Me parte lo que queda de mi alma este concepto.
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